Neuromodulación

Neuromodulación
Es uno de los tratamientos más conocidos, aunque no de los que goza de mejor prensa debido a los excesos que todos hemos observado en los rostros de muchas famosas. Sin embargo, realizado en su justa medida y respetando el principio de “menos es más” los resultados son naturales y espectaculares, de forma que la gente que lo prueba suele repetir.

Y es que la máxima de la toxina botulínica hoy en día no es la de “planchar” las caras y dejar pieles absolutamente lisas pero inexpresivas, sino la de relajar musculatura de la mímica facial hipertónica o con excesiva actividad que provocan facciones o gestos duros y muy rudos, para obtener caras con aspecto más suave, menos cansado o más relajado, consiguiendo secundariamente minimizar arrugas profundas e incluso llegar a desaparecer arrugas finas y de expresión.

El tratamiento dura apenas 30 min, es totalmente indoloro, gracias al ínfimo calibre de las agujas empleadas, y el efecto comienza a verse a los entre 3 y 5 días de la sesión, obteniendo el efecto completo a los 15 días, momento en el cual se realiza una sesión de revisión por si fuera preciso algún retoque para corregir alguna posible asimetría. En cualquier caso, manos expertas, una correcta entrevista clínica y una adecuada información y consenso de los resultados esperados son la garantía de un tratamiento efectivo y satisfactorio sin sorpresas desagradables.